Seguros REALE

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Seguros Reale ofrece: seguros autos, moto, hogar, vida riesgo, vida ahorro, salud, además de otros servicios.

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Seguros Reale

Desde su implantación en la Península Ibérica en 1988, la filial española de la mayor mutua de seguros de Italia ha ido ganando espacio en el sector, siguiendo un crecimiento constante, que ha estado por encima de la media. Su estrategia basada en alianzas y compras, ha consolidado su posición en nuestro país al mismo ritmo que ha ido ampliando los servicios al asegurado y la cartera de productos que oferta.

En España, en la última década ha sido cuando Seguros Reale ha desarrollado una mayor actividad corporativa. A destacar, en 2002 la compra de Imperio Vida y Diversos, S.A., así como de una parte de la cartera de Victoria Meridional, Compañía anónima de Seguros y Reaseguros, S.A.

En 2005 logra duplicar su volumen de negocio cuando compra Aegon Seguros Generales, dos años después se hace con la cartera de seguros y la totalidad de los activos y los pasivos de Mutua Flequera de Catalunya de Seguros y Reaseguros. En los años 2008 y 2009 establece alianzas con Caixa Terrassa y con CAI (Caja de Ahorros Inmaculada), respectivamente. Con la primera, para desarrollar conjuntamente el negocio de seguros de No Vida, y adquiriendo una participación del 50% de Caixa Terrassa Previsió. Con la segunda, haciéndose con el 50% de las acciones de la Sociedad de CAI Seguros Generales.

En la actualidad, más de 1.500.000 asegurados confían en  Seguros Reale. Pero, como manifiesta la compañía, hay una cosa que no ha cambiado desde sus inicios: a sus asegurados siempre les dedican la misma y cuidada atención. Y esa atención viene apuntalada por una muy buena relación de calidad-precio, y por un nivel más amplio de coberturas. Seguros Reale ofrece en la actualidad seguros de coches, vida, hogar, moto, entre otros.

La primera mutua de la historia en Italia

Reale Seguros forma parte del Grupo Reale Mutua, que cuenta con una larga historia que se inicia el 31 de diciembre de 1828, cuando en Turín, entonces capital del Reino de Cerdeña, se constituye la “Sociedad Real de Seguros Generales y Mutua contra los Incendios”. Al año siguiente, el rey Carlo Felice expresa con Patentes Regias su propia satisfacción y, acto seguido, suscribe la póliza nº 1 para asegurar el Palazzo Chiablese, su residencia. En 1844 al ramo de incendios se une el ramo del granizo. La historia de estos años ve expandirse al Reino de Cerdeña, siguiendo el sueño de la unificación de Italia. Reale se va moviendo al mismo paso: en 1859 se abre la delegación de Milán y, poco después, muchas otras agencias en el norte de la Península Itálica.

Con la unificación de Italia, Reale amplía sus límites geográficos: comienza a operar primero en el centro y luego en el sur de la península. En 1867, en la región del Veneto, recientemente destrozada por los Austrias, se inauguran las agencias de Venecia, Vicenza y Rovigo. En 1870, después de la “Brecha de la Porta Pia”, día de la caída del poder temporal del Papado, también los territorios pontificios pasaron a formar parte del Reino de Italia y, rápidamente, la empresa abre la sede de Roma. En 1889 fue el turno de la agencia de Nápoles. La red de las Agencias Principales está ahora compuesto por 60 agencias.
A caballo entre los siglos XIX y XX, Reale se refuerza y se reorganiza. En 1919, los asociados ya suman unos 400.000 miembros, el doble de los que había 30 años antes. Y consolida su propio peso en el contexto social del país: en plena Guerra Mundial decidió destinar grandes sumas de dinero a organizaciones benéficas y de ayuda a los combatientes, a sus familias, a los discapacitados, a los prisioneros.

En 1922, Reale decidió explorar nuevos ramos de seguros. Cambió, por ello, el nombre y se convirtió en la «Real Sociedad Mutua de Seguros». A partir del 1929, año de la Gran Depresión, Reale abre los nuevos ramos de «Accidentes», «Responsabilidad Civil», «Daños», «Robos», «Vida». Las agencias distribuidas en todo el país llegan ya a 90. En 1933, Reale se trasladó a la Via Corte d’Appello, su sede actual. Mientras tanto, la situación económica se alivia y se inicia una década de desarrollo. Pero la Segunda Guerra Mundial vuelve a abrir un período de oscuridad.

El período de la posguerra vio una recuperación económica general del país. A partir de los años 60, Reale asume las características típicas de la gran compañía de seguros, tiene compañías asociadas y opera también en el extranjero. En los primeros años de la década de los noventa supera ya el millón de clientes; en 1991 alcanzó el hito de un billón de liras de facturación.